2012; el año del fin del mundo, del cambio de ciclo, del
cambio de una era.
El año en el que te conocí.
Como conocí a tantas personas que hoy forman parte de mi
vida: en una situación normal, del día a día. No fue espectacular,
extraordinario; fue todo muy sencillo; como quién conoce a una nueva persona,
un futuro colega, un amigo.
Había momentos en los que una mirada se escapaba
inevitablemente cuando uno de los dos no se daba cuenta; pero no había que
darle mayor importancia.
Las horas pasaron, y aquella misma situación se volvió a
repetir una vez más; la situación dejaba de ser normal, dado que los
acontecimientos ya no eran nuevos. Aquello cobraba ya importancia.
Un nuevo día dio paso a una nueva noche; y aunque todo
pareciera destinado a un cambio, volvió a repetirse. Pero esta vez, nuestra
miradas se juntaron; y nuestros labios también.
Y terminó el 2012; y sí, hubo un cambio; un cambio que ha dado
un vuelco a mi vida. Un cambio que comenzó con una situación normal; un cambio
que tuvo lugar sencillamente; un cambio que ha dado sentido a mi vida.
Un cambio que me da vida; TÚ, mi cambio, mi vida.
1/1/2013
Te amo.